El partido de esta tarde entre Argentina y Serbia debe tomarse desde dos puntos de vista: desde lo deportivo en sí y desde qué tanto pondrá cada uno para llevarse el primer puesto del Grupo.
Aunque suene reiterativo, va una vez más la explicación. El que termine primero deberá viajar a Estambul el viernes 3, y jugar el sábado 4 ante el cuarto del Grupo B (Brasil o Croacia), cuya sede es Estambul, por lo que no tendrán viaje. No será el mismo estadio, pero no tendrán el desgaste de viajar.
El que salga segundo, en cambio, recién jugará su partido de octavos de final ante el tercero del B (Brasil o Croacia), el martes 7, por lo que tendrá, desde hoy, 4 días en el medio. Para Argentina, algo así parece vital para recuperar a Oberto, pero tampoco es todo tan claro ni sencillo.
Primero, salir segundo significa perder hoy, y eso nunca es bueno antes de los cruces. Algunos ponen el ejemplo de Atenas 2004 (se cayó ante Italia), pero no abundan los casos positivos. Segundo, es cierto que se ganan días de descanso para octavos de final, pero después se pierden para los cuartos, donde el choque sí o sí va a ser muchísimo más duro, sea quién sea el rival.
Lo cierto es que no hay una opinión común y, de hecho, entre los propios jugadores argentinos pareció no haber unanimidad al respecto. Está claro que tener a Oberto es fundamental, pero también lo es este grupo no tiene mentalidad para especular con resultados. ¿Será Serbia igual? Ayer, su entrenador Dusan Ivkovic, dio a entender que no le importa demasiado salir primero o segundo. Raro en un ganador nato como él.
En lo basquetbolístico, con la suma de Krstic ayer ante Australia, quedó claro que Serbia es un equipazo. Lo fue siempre, pero sin su base titular (Teodosic) y su pivote (Krstic), lo que venía mostrando era limitado. Por eso, cuando algunos arriesgaron que no eran fuertes, es evidente que no analizaban la importancia que tenían las dos ausencias.
¿Qué tiene Serbia? De todo. Su único punto relativamente flaco es que Krstic, con 27 años, es el jugador más viejo del plantel. Por ende, no tienen tantas batallas encima, aunque muchos juegan todo el año en el mejor nivel internacional o de la NBA. Otro dato: ningún jugador mide menos de 1.95, ni siquiera los bases.
Tienen dos pivotes de 2.13 metros o más (Krstic y Perovic), un alero chico de 2.09 (Bjelica), recientemente fichado por el Baskonia, un interior/exterior como Velickovic, de 2.05, versátil, compañero de Prigioni en el Real Madrid. Tiene tiradores tremendos como Teodosic, Rasic, Keselj...corren la cancha, se pasan la pelota como los dioses. Ejecutan todo bien, y a una gran velocidad. No es nada descabellado pensar que este grupo que promedia 23.7 años, va a explotar entre Londres 2012 y Madrid 2014, con la chance de hacerlo aquí mismo, en Turquía.
Para Argentina sería importante ganar el juego, más allá de los días de descanso, por lo que significan los triunfos ante potencias, pero más que un triunfo, lo que precisa el equipo de Hernández es, de una vez, mostrar una cara un poco más sólida, aunque sea real que la ausencia de Oberto complica mucho. Ayer, ante Jordania, fue la zona la que dejó en evidencia los problemas. En otros casos fue la desconcentración, el cansancio. Pero se ganaron los 4 partidos. A partir de ahora, difícilmente los errores grandes puedan disimularse demasiado.
Fabián García (Enviado especial a Turquía) /
BásquetPlus
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