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miércoles, 1 de septiembre de 2010

MUNDIAL TURQUIA 2010 - VICTORIAS DE SERBIA, ANGOLA, EE.UU, ESLOVENIA Y CROACIA



SERBIA 94 – AUSTRALIA 79

El partido del morbo no decepcionó. Quizás faltó que Australia creyese más en sus posibilidades para poner en un encuentro en un puño, ya que la reacción final de los Boomers fue tardía y estéril, aunque hubo alicientes y tensión durante 40 minutos. Gibson convirtió en triple el primer balón que le llegó, sin imaginar que ese 0-3 supondría la máxima ventaja para los suyos en todo el partido. Velickovic y Teodosic no tardaron en poner a Serbia por delante y la primer canasta de Krsic tras su sillazo a Borousisestiró la ventaja balcánica hasta los 6 puntos: 16-10.

El segundo cuarto, el más bonito del partido, fue la mejor demostración de que si de algo puede presumir Serbia, es de ser un equipo, precisamente el defecto en el último Mundial que disputó. Si no era Krstic aparecía Teodosic y, si no, Rasic o Savanovic. Un triple de Keselj, quizás el jugador que esté aprovechando mejor sus minutos en Turquía, parecía romper el encuentro (39-28, m.17), aunque entre Worthington y Maric se encargaron de limar diferencias, para irse con sólo 6 de desventaja a vestuarios, a pesar de la canasta sobre la bocina de Perovic (43-37).

La batalla de triples beneficiaba a Serbia, que explotó su superioridad en el rebote para volver a abrir brecha en el siguiente periodo (55-44, m.23), aunque los puntos de Mills evitaban el despegue definitivo de los europeos. Maric, que jugaba contra los suyos, hizo un partido serio y acabó en dobles figuras, volvió a dejar la desventaja australiana en 6 puntos pero la tónica estaba ya clara y el guión se volvió a cumplir. Serbia se escapó por 13 después de un triple de Markovic(65-52) y Australia volvió a apretar para llegar con vida al último cuarto (69-61).

La persecución fue una constante en el cuarto decisivo, que dejó sensaciones agridulces, ya que ni Serbia pudo rematar ni los australianos pudieron aprovecharse de los fallos de su rival para remontar. Un mate de Newley y un triple de Nielsen pusieron al rojo vivo el partido, pero la alegría oceánica sólo duró 11 segundos, los que tardó el mejor de los serbios, Teodosic, en stenciar desde la línea de 3: 84-78. El 10-1 final en los últimos dos minutos sólo sirvió para convertir en engañoso un resultado que tuvo que ser más reñido por los méritos de cada equipo.

ANGOLA 92 – ALEMANIA 88 (78)

Todo podía pasar. Y todo pasó. Jagla fue el primero que se dejó ver en el encuentro, rompiendo la igualdad inicial con una canasta que culminaba un 7-0 de parcial y el primer demarraje germano (15-8, min.7). Pero Cipriano, el otro héroe del día, se echó al equipo a la espalda para remontar en un mero pestañeo, dejando con un triple a Angola por delante. Los africanos, con un 0-5 de inicio, avisaban al comienzo del segundo cuarto (19-24), pero Schwethelm le dio la vuelta al partido en sólo 15 segundos, con triple y 2+1. Turno para Angola que, ahora con 6 puntos consecutivos deLutonda, tomaba el mando del encuentro, más aún cuando Almeida acertó desde 6,25: 26-35 (m.18).

Alemania, que echaba de menos los puntos de Jagla, se perdía entre sus pocas ideas en ataque y la buena defensa de Angola, capaz de anular a los pívots germanos y de amenazar constantemente la línea de pase de su rival, que bastante hizo con llegar al descanso aún con vida: 35-40.

Sus opciones parecieron evaporarse en el tercer periodo. Hasta en tres ocasiones los angoleños, con Mingas y Lutonda secundando a Cipriano, alcanzaron los diez puntos de diferencia, aunque los alemanes, muy irregulares, sobrevivían a base de tres en tres, con un Schaffartzik recordando al tirador que asombró en el Eurobasket 2009: 54-58 (m.30).

Un par de triples consecutivos de Staiger cambiaba el signo del choque, y, para colmo, apareció al fin Jagla, que encadenó 9 puntos de todos los colores con aroma a sentencia: 74-64 (m.37).Cipriano hizo creer a los suyos con un mate animal y salvaje, uno de los mejores del torneo y preludio de un minuto a camino entre el surrealismo y la genialidad. Con 77—73 en el luminoso, ocurrió de todo. Se señaló “5 segundos” a los angoleños por su lentitud al sacar, Alemania perdió el balón, Angola hizo falta en ataque, los alemanes respondieron sacando directamente a fuera de banda y Ambrosio se sacó de la nada un tiro imposible a tabla que se convirtió en triple. ¡Viva el basket! ¡Viva el circo!

A continuación, Schaffartzik se dejó un tiro libre por el camino, Cipriano no perdonó desde la línea (78-78) y el base alemán volvió a errar la última posesión. Habría prórroga, donde Angola no tuvo rival. Repleta de ilusión y hambre de triunfo, Gomes puso por delante a su equipo y Ciprianolo terminó de catapultar con cuatro puntos consecutivos (¡finalizó con 30!). Benzing prolongó la agonía de unos alemanes erráticos en las posesiones finales y apeados del Mundial (88-92) tras haber hecho lo más difícil, ganar a Serbia. ¡Angolazo!


Fuente: ACB


ESTADOS UNIDOS 88 – IRÁN 51

Cumpliendo y a otra cosa. Estados Unidos no se esmeró demasiado en derrotar a Irán. Lejos de la brillantez y la capacidad arrolladora que pueden alcanzar, se emplearon con seriedad para tumbar a Irán y al final arrollaron (+37). Así, USA se expulsa los malos espíritus de la apurada victoria ante Brasil. Por los asiáticos, Hamed Ehadadi y Arsalan Kazemi (ambos en Estados Unidos, Memphis Grizzlies y Rice University, respectivamente) fueron los más destacados, en un equipo que combatió en el primer cuarto.

Y es que la motivación iraní fue argumento suficiente para que los primeros minutos del partido estuvieran igualados. Buscando desesperadamente al NBA Ehadadi, los iranís lograron ponerse por delante (5-3), aunque a partir de ahí los americanos ya no soltarían su ventaja. Krzyzewski, sabedor de la enorme ventaja de su equipo, rotaba a sus jugadores mucho más de lo que lo hizo en el encuentro ante Brasil. Con los minutos equilibradísimos, unos enormes minutos de Kevin Love empezaron a abrir la brecha decisiva: 19-33 tras un triple del de los Wolves.

Pese a la victoria con suficiencia al descanso (28-42), Estados Unidos no estaba arrollando como había hecho en otros partidos del campeonato. Tampoco era suficiente, simplemente se trataba de seguir creciendo en el Mundial y reponerse del susto brasileño. El segundo cuarto iraní estuvo marcado por el buen hacer de Kazemi (de formación estadounidense), que junto a grizzlie Ehadadi eran los líderes del equipo (16 de los 28 puntos al descanso).

Apenas llegaban a los dobles dígitos en anotación, pero todos los estadounidenses anotaban, mientras en Irán seguían siendo Ehadadi y Kazemi los que lideraban a su equipo, en ese particular duelo con los jugadores de su país de trabajo. El último cuarto quedó para la reivindicación de Love, algunas jugadas brillantes de USA y el 51-88. Diferencia de 37, muy a medio gas.

ESLOVENIA 80 – BRASIL 77

El partido ante Estados Unidos parecía mostrar a una Brasil que apuntaba algo más alto. Pero Eslovenia la aletargó durante los tres primeros cuartos, y con solo 10 minutos competitivos no se ganan partidos. Y menos a una Eslovenia cada día más seria, más compacta y regular que se gana con merecimiento el segundo puesto del grupo.

Brezec y su sustituto Vidmar empezaron el encuentro golpeando fuertemente la pintura brasileña. Ante sus 12 puntos combinados, Magnano dio entrada a Varejao, que todavía no había debutado en el Mundial a causa de problemas físicos.

Eslovenia empezó a conseguir ventajas serias en el segundo cuarto, con un 18-26 que obligaba a Magnano a recorrer al tiempo muerto. Su equipo sufría de precipitación en ataque, pérdidas estúpidas y problemas en la determinación de sus prioridades ofensivas. Mientras tanto, Eslovenia sabía aprovechar las continuas ventajas que Brezec estaba logrando en la pintura. El pívot NBA había tenido que volver a la pista tras una dura falta a Vidmar, que se marchaba dolorido en un hombro, aunque quedó en anécdota. Hasta el 18-34 se escapaban los eslovenos, con 14 de Brezec (terminó en 16). La historia se explicaba con pívots, pues los puntos seguidos de Splitter(19, al final) empezaba a dar la cara por los sudamericanos. Jaka Lakovic no estaba demasiado conforme con la reacción brasileña, que cortó por lo sano con dos triples, para irse al descanso con 30-44 y bronca de Magnano.

Sin problemas para correr y aprovecharse de las numerosas imprecisiones brasileñas, Eslovenia no tendría problema para mantener una ventaja que se había establecido alrededor de los 10 puntos. La mejor imagen de los europeos y la peor cara sudamericana era la combinación perfecta para la ampliación de la ventaja. Cada ataque brasileño era un dolor y cada ataque esloveno un sabor. Hasta un momento, el que necesitó la dinamita brasileña para estallar. Dos triples seguidos de Marcelinho Machado animaron el partido. Las tornas se habían dado la vuelta y agudizado: Eslovenia era incapaz de retener el balón en sus manos y a Brasil le salía todo. Empezando a sumar: dos contraataques fáciles, otro triple de Machado, canasta de Splitter... Parcial de 15-0 que atenazaba a Eslovenia, hasta que Lakovic (20 tantos, 6 triples) rompió la maldición como mejor sabe hacerlo. Y por partida doble: dos triples para 68-76.

El control del rebote defensivo y la calma ofensiva acabaron dando la victoria a Eslovenia, junto con la aparición providencial de Lakovic. Brasil se aplicó solamente 10 minutos, insuficiente para tumbar a una Eslovenia rompepronósticos.

CROACIA 84 – TÚNEZ 64

Victoria croata para recuperarse de las malas sensaciones. Partido para que sus jugadores siguieran creciendo en el campeonato y segunda victoria para encaminar su pase a octavos de final. Tras su cuarta derrota consecutiva, los tunecinos ya no tienen opciones de avanzar.

Croacia no podía repetir el desastre del partido ante Eslovenia y no lo hizo. Todo era diferente desde el inicio, el juego interior carbura (Ante Tomic volvía a ser él mismo) y, pese a las dos faltas rápidas de Roko Ukic, Marko Popovic sacaba su metralleta. Sólo Dhifallah impidió que Túnez cayera con estrépito al término del primer cuarto (23-12). Se ampliaría al descanso, con un 43-23 ya definitivo, con los croatas anotándolo todo desde el triple (la comparación asusta: Croacia 7/11, Túnez 2/11).

Croacia aprovechaba para dar descanso a jugadores importantes, como Ukic (con hielo en el tobillo), y repartir minutos entre sus suplentes. Tan escasa era la oposición africana que Croacia no lanzó ningún tiro libre hasta el último cuarto. Únicamente Macram Ben Romdhane ponía problemas a los croatas cerca del aro. Con 23 puntos fue la estrella tunecina, provocando faltas cerca del aro. Por Croacia, Tomic se desquitó con 15 y 9 rebotes y Bojan Bogdanovic se convierte en el máximo anotador del equipo en el campeonato tras anotar 19.

Fuente: ACB

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