Brasil y Magnano se vuelven a casa. La Generación Dorada dio una nueva muestra de carácter y venció 93 a 89 a la “Verdeamarelha” por los octavos de final del Mundial de Turquía. Luis Scola tuvo otra actuación para la historia: 37 puntos y 9 rebotes, además de ser clave en el cierre. Delfino, Prigioni y Jasen también jugaron un partidazo. Ahora se viene Lituania el jueves para acercarse al podio. Joaquín Zurletti - Enviado Especial a Turquía
El resultado del primer cuarto (25-25) reflejó la paridad que se esperaba, sin embargo por el juego de los dos equipos se esperaba un goleo más bajo. Los dos equipos estuvieron muy efectivos, pero ninguno se pudo sentir dominador del juego. Brasil comenzó jugando con la bola mucho tiempo en sus perimetrales que rotaban muy bien el balón hasta terminar con un pick and roll con Varejao, aunque pocas veces llegaba el balón a estos al poste bajo.
En tanto Argentina apostaba a su as de espada Luis Scola que anotó los primeros siete puntos del equipo con un triple incluido. Ahí se terminó por un rato el unipersonal del Luifa y arrancó el de Carlos Delfino que con triples (más uno de Hernán Jasen) le dio diferencia de cuatro, 21-17. Sin embargo en el mejor momento de Argentina, un rápido triple de Barbosa puso a tiro a Brasil que emparejó y cerró el cuarto plantado en zona 2-3, pese a la buena efectividad de tres de Argentina en el parcial (5-6).
Barbosa volvió a romper la paridad con otro triple y Brasil se puso 30-27 en el arranque del segundo. Jasen corrigió una bola increíble que falló Román González, Prigioni volvió a la cancha con un triple y Scola colaboró con un doble desde la bocha para que Argentina de la nada vuelva a tomar distancia de cuatro 34-30, lo que era la máxima hasta ahí. En un desarrollo parejo que se hizo trabado por las faltas (22 en la primera mitad), el equipo de Sergio Hernández mantenía la ventaja de dos o cuatro puntos hasta que Leo Gutiérrez clavó una bomba desde casi siete metros que le dio ventaja de seis con un minuto en el reloj.
Brasil no estaba fino en ofensiva, sus internos no dañaban y solamente se mantenían con los puntos del veterano Marcelinho Machado (ocho en el parcial), hasta que volvió el otro Marcelinho, Huertas, para cerrar el cuarto. El hombre del Tau primero metió un triple y falta con tablero aprovechando la inexperiencia de Cequeira que cayó sobre él, y luego puso en ventaja a su equipo desde la línea con 15 segundos por jugar. Quedó 48-46 para Brasil y a los vestuarios.
La Selección tardó en salir al campo de juego y los de Rubén Magnano siendo más incisivos con Varejao y Splitter estuvieron con ventaja de siete (48-55). Por suerte apareció Delfino con un oportuno triple y una gran penetración en la réplica para acercar a Argentina a dos, 53-55. El partido entró nuevamente en un desarrollo muy parejo, en el que los dos equipos defendían duro en hombre y los jueces se mostraban muy celoso (Brasil tenía a García y Barbosa con tres mientras que Argentina repartía mejor y el único cargado era Cequeira con cuatro), aunque ahora el que mandaba en el marcador por una leve ventaja era Brasil.
Recién a dos minutos del final del cuarto, la albiceleste pudo igualar en 64 con un doble de Scola (diez en el cuarto) y cerró el cuarto en paridad con una penetración de Delfino (siete en el parcial). Todo igual para los últimos 10 minutos, Brasil un poco más cargado de faltas y Argentina un poco más cargado en los minutos de sus jugadores.
Barbosa y Jasen arrancaron los diez minutos finales intercambiándose triples en la cara. Primero el de los Raptors clavó dos y luego “Pancho” se los devolvió para igualar en 72. A falta de 6.47 Leandrinho cometió su cuarta personal en una buena señal para Argentina.
Una de esas bombas que nos tiene acostumbrado Leo y un doble de Jasen pusieron las cosas 79-74 con un poco más de medio cuarto por jugar. Todo era nerviosismo en el Sinan Erdem Dome, aunque con un seleccionado “albiceleste” firme en su tablero.
Cuatro puntos extraordinarios de Scola pusieron a los nuestros 85-79 a falta de 2:14 en el reloj, pero respondió Huertas con un triple. Seguidamente hubo falta ofensiva de Delfino, que le devolvió la pelota a la “Verdeamarelha” cuando restaban 1:40 y Marcelinho clavó dos libres
Scola otra vez apareció en toda su dimensión. A 1:04 del cierre puso el partido 87 - 84, después le quitó la pelota a Leandrinho y en el ataque posterior metió un doble tremendo de cinco metros (89-84 a falta de 24 segundos). Monumental el jugador de los Houston Rockets.
Luego Tiago Splitter metió un doble cercano al canasto. Luego Brasil cortó con foul y Delfino encestó dos libres con 7.6 segundos para el cierre. Huertas no dio por terminado el juego y con 1.9 clavó un “bomba” (91-89). Splitter le hizo falta a Scola, que volvió a mostrar su sapiencia. Metió los dos tiros libres y se terminó el partido.
Joaquín Zurletti - Enviado Especial a Turquía
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