No es fácil analizar en el balance, la actuación argentina en el Mundial U17 de Hamburgo, Alemania. La idea previa al torneo era ir a luchar por un lugar en el podio y este noveno puesto final obtenido hoy sábado suena a poco.
Sin embargo, tampoco debería caérsele encima a estos pibes que mostraron talento, condiciones y falencias, y que estas últimas, a alto nivel, no pudieron disimularlas, sobre todo la falta de tamaño cerca del cesto.
Ante España, el equipo, al menos, pudo terminar el torneo con una alegría, y de las importantes, porque justamente lo que hicieron fue algo que no habían podido lograr en el torneo: ser duros en el último cuarto.
Argentina entró a los 10 minutos finales perdiendo por 5, pero primero metieron un parcial de 7-0 para pasar al frente 54-52, y después hicieron que España no pudiera anotar en los últimos ¡5m42s de partido!
Increíble la defensa argentina en ese lapso, que destrozó moralmente a los españoles, que tiraron en el últmo período 2/13 de cancha y perdieron 7 pelotas.
Brillante ahí lo del equipo criollo, que levantó una máxima diferencia de los españoles de 8 en el tercer cuarto (48-40), luego de un desarrollo general bastante parejo.
En Argentina todos funcionaron en un nivel equitativo, con 12 puntos de Massone, 12 y 5 rebotes de Herrera, 11 y 6 de Garino y 10 puntos, 6 rebotes y 6 recuperos de Matías Bortolín. Argentina totalizó 14 recuperos, el número del partido.
Argentina (66): Massone 12, Marchisio 3, Garino 11, Bortolín 10 y Herrera 12 (FI); Tuero 0, Massarelli 8, Goldenberg 3, Zanzottera 5, Benítez 0, Chávez 0 y Gallizzi 2. Entrenador: Enrique Tolcachier.
España (56): Fernández 3, Sanz 5, Cerqueira 0, Medori 6 y Suárez 5 (FI); Ramón 6, Costa 3, Pampano 0, Conde 9, Diop 2, Olaizola 4 y Diez 13. Entrenador: Diego Ocampo.
Cuartos: 16-13, 32-34, 47-52 y 66-56.
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