Independiente de Neuquén volvió el miércoles a la victoria en la séptima fecha de la zona Sur del TNA, ante su homónimo de Tandil, pero algo comenzó a renovar el ánimo de los jugadores y el cuerpo técnico: la llegada de un grupo de inversores que comenzaría a trabajar en el club, como hace dos años, de la mano de Pablo Grittini y Néstor Obreque.
Este último, aseguró ayer que “no podemos hablar de un gerenciamiento. A mí me convocó Pablo Grittini para colaborar con el club porque vemos al presidente (Gastón Sobisch) muy sólo y la situación del básquet hoy no es la mejor”.
“Grittini me pidió que me acercara y que dejará de lado las diferencias que en su momento me hicieron alejarme y acepté porque es el club de mis amores y verlo en ésta situación duele”, contó el empresario.
Obreque y Grittini tuvieron un exitoso paso por Centro Español de Plottier, cuando el conjunto de Plottier logró su chance de jugar la Liga B, pero ninguno quiere apresurarse. “Hasta no tener el panorama claro no podemos hacernos cargo. El lunes o martes vamos a tener los números del TNA y ahí tomaremos la decisión cual será la forma en que vamos a estar. Aunque vamos a colaborar con el club”, afirmó Obreque.
“Ya hablamos con los jugadores y el cuerpo técnico para ir interiorizándonos de cual es la situación. También ya hemos programado reuniones con empresarios para que se acerquen al club”, reconoció.
Para finalizar, el empresario aseguró que “la idea es trabajar en conjunto, no individualmente, para corregir errores de muchas partes. Hay que mirar para adelante y después se verá el porqué se llegó a esta instancia. Necesitamos de todos, para que Independiente este en el lugar donde tiene que estar”.
Las soluciones dentro de la cancha las mostraron los jugadores el miércoles e intentarán repetirlas el domingo en Bragado, ante Ciudad. Fuera de ella comienzan a tener un comienzo de solución, que será clave para el futuro del básquet del Rojo.
Fuente: La Mañana de Neuquén
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