Leandro García Morales nació el 27 de junio de 1980 en Montevideo, Uruguay. Es escolta y mide 1.85 y viene de ser dirigido por Guillermo Narvarte en la última temporada en el equipo uruguayo de Biguá.
Leandro viene de jugar 22 partidos en la LUB (Liga Uruguaya de Básquet), para el Club Biguá donde sumo 21.9 puntos por partido, 4.3 recuperos por partido, 4.8 asistencias por partido y un promedio de valoración de 24.3
De ésta manera el uruguayo llega a San Martín para afrontar el duro desafío de lograr la permanencia en la máxima categoría.
La dirigencia Rojinegra en conjunto con el cuerpo técnico están analizando quien será el jugador cortado para que el escolta uruguayo pueda ocupar un lugar.
La entrevista en Uno contra Uno radio: "Asumí este reto porque siento que se puede"
A horas de arribar a Corrientes, donde jugará en San Martín hasta que finalice su participación en la temporada, Leandro García Morales estuvo en Uno contra Uno Radio (Radio Argentina AM570). El escolta uruguayo, que proviene de Biguá y seguirá su carrera en Cocodrilos de Caracas, analizó su desembarco en la Liga Nacional y el desafío que tiene por delante, tratar de dejar al equipo correntino en la máxima categoría del básquet argentino.
–Imagino que con expectativas renovadas y con un desafío complicado por delante.
–Sí, tal cual. Es un poco de las dos cosas. Con ganas de jugar, porque hace mucho tenía ganas de jugar la Liga Nacional. Soy consciente que es una situación difícil, pero me gustan los desafíos.
–Recordemos que tuviste un paso por el Torneo Nacional de Ascenso jugando para Pedro Echagüe. Además, tuviste algunas ofertas de clubes importantes de la Liga Nacional y dijiste que no.
–Sí, cuando me desvinculé de Biguá hubo un par de ofrecimientos. Lo que pasa es que tengo un compromiso acordado con un equipo venezolano a partir de abril. Y se me complicaba, porque los equipos que me ofrecieron venir querían que esté para el resto de la temporada. No me pude comprometer por esa parte. Por esa razón es que muchos equipos desistieron de contratarme. Esta situación fue ideal, porque la etapa de San Martín termina en esa fecha. El equipo necesita un refuerzo para jugar esta instancia final y a mí me vino muy bien.
–Más allá de la situación complicada, vas a estar con un técnico al cual conocés.
–Sí, Guillermo (Narvarte) me dirigió en Biguá. Lo conocía desde antes, pero no había tenido la oportunidad de jugar para él. Pero es una situación linda, más allá de que en los últimos años me tocó pelear más para arriba o tratar de salir campeón. Esta es una situación diferente, más difícil y con algo más de presión. A su vez, conozco a Jack Martínez y otros jugadores. Si no creyera que tenemos posibilidades de lograr el objetivo, no hubiera asumido este reto. Estoy seguro que el equipo puede levantar.
–Hay que acoplarse rápidamente, porque casi no hay tiempo.
–Sí, quedan muy pocos partidos en la temporada y llegan los cruces. Estos partidos me servirán para ajustarme un poco a la Liga, y los compañeros. Además, para tratar de hacer los mejor posible.
–¿Cuándo llegás a Corrientes? ¿Cuándo va a ser tu primer entrenamiento?
–Me estoy yendo para Corrientes. Si no pierdo ningún vuelo, que me estaban diciendo que está medio complicado, llegaré cerca de las 21. Supongo que mañana temprano entrenaré con el equipo. Esta noche ya estoy a las órdenes.
–¿Creés que tienen grandes chances de salvarse del descenso?
–Sí, sin dudas. Creo que es un equipo que está muy bien conformado, que tiene grandes jugadores y un buen entrenador. Además, y pese al mal momento, la gente los está apoyando. No veo por qué no se pueda dar vuelta la situación. También hay buenos extranjeros y nacionales. Los resultados no acompañaron durante el año, pero teniendo en cuenta los demás equipos que están al fondo de la tabla se puede pelear perfectamente.
–Teniendo en cuenta lo que nos decías, ¿en ninguna etapa de tu carrera te tocó jugar una instancia decisiva por un descenso?
–En Italia, el primer año que estuve, peleamos el descenso. Pero es diferente, porque se juegan dos ruedas y el que termina último desciende. Simplemente teníamos que ganar un partido más durante la fase regular y fue lo hicimos. Pero nunca una instancia de playoffs, con varios partidos y ventaja de cancha. Y en la que uno de los dos termina descendiendo. Nunca lo pasé. Además, es algo que no se da en muchas Ligas. Es otra de las cosas que la hace bonita.
–¿Cómo imaginás esa instancia?
–La verdad que no sé. Todo se dio bastante rápido como para procesarlo. Desde ya te digo que van a ser muy importantes las dos semanas que faltan para agarrar ritmo en lo personal. Además, para acoplarme a lo que viene haciendo el equipo. Sé lo que hace Guillermo. Un playoffs a tres partidos, con la calidad individual de jugadores que hay, creo que hay muchas posibilidades de competir y lograr el objetivo.
Fuente: Prensa San Martín de Corrientes
B.Plus
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario