Recostado en el asiento confortable del ómnibus que lo llevaba del estadio de Nueva Orleans al aeropuerto, para volver a San Antonio después de una gira de cuatro partidos en seis días, Emanuel Ginóbili apeló a la honestidad brutal en un diálogo de 25 minutos con Clarín. Manu está frente a un momento clave de su vida: será padre a comienzos de junio, admite como primicia que siente que será un ex Spurs el 1° de julio y deberá sentarse con la mente fría para decidir dónde seguirá su carrera y si ello le permitirá jugar el Mundial de Turquía. Larga entonces un mano a mano donde el zurdo abandonó su diplomacia a la hora de declarar y sacó a relucir la pelea íntima que vive sobre su futuro inmediato.
¿Querés jugar el Mundial?
Sí, como querer, quiero. Si me toca mirarlo desde afuera, me va a doler mucho, lo voy a extrañar y me voy a comer hasta los dedos. Pero es una de las posibilidades. Lo dije desde que terminaron los Juegos Olímpicos. No va a ser tan fácil decir: "Voy y juego". Tengo que evaluar muchas cosas y ver qué pasa con el futuro. Pero ganas tengo siempre.
Por lo que decís, querés y tenés ganas, ¿pero vas a jugar el Mundial?
La situación no cambió demasiado después de Beijing. Salvo mi futura paternidad, que hace más compleja aún la decisión. Un mes y medio después de que nazcan mis hijos habría que empezar a entrenar con la Selección. Me sentaré con mi mujer a la hora de planificar el futuro y debo ver si puedo tener un seguro en caso de no haber firmado con un equipo. Será un momento durísimo y no quiero que afecte en el día a día.
¿Y qué pasará en ese momento?
Yo sé que pierdo como sea. Cuando llegue julio o agosto, tengo en claro que pierdo como sea. Decida jugar o no juegue, saldré perdiendo.
Si jugás, no estarás con tus mellizos...
... y me afectará conseguir un equipo para la temporada que viene. Y si no juego me va a doler. Es muy jodido.
Pero no me digas que un jugador como vos no va a tener ofertas rápidamente...
Sí, pero las ofertas no garantizan firmar contratos. Además es el receso más importante en cuanto a jugadores libres. Muchos equipos tienen lugar en el tope salarial para firmar jugadores importantes. Hay que ser realista: no soy la primera opción de ningún equipo. Van a a buscar a LeBron, a Wade, a Bosh... Cuando firmen ellos, después llegará mi tiempo.
Tony Parker y Yao Ming no irán al Mundial, Wade abrió el paraguas, Pau Gasol dijo que se ve lejos. ¿La NBA domina a la FIBA en cuanto a la presencia de sus jugadores?
No sé qué hará el resto pero no es fácil jugar todos los años. Los cuerpos cambian y yo tengo 32. No es tan fácil. Son dos meses que das de tus vacaciones, que es cuando tu cuerpo debe recuperarse. Se hace complicado. Uno que lo vive entiende lo que es jugar 82 partidos más los playoff. Seguro que a la gente no le gustará si falta alguien.
¿Y cuánto te importa lo que se diga de vos o de otros en caso de que no jueguen en Turquía?
Sé que si no voy al Mundial, me van a terminar matando. Siendo como somos los argentinos, está claro que siempre va a suceder... Eso está claro, pero cuando llegue el momento decidiré sabiendo eso también. Entra en juego mi cuerpo, mi futuro, mi familia.
¿Para qué sentís que está Argentina en el Mundial?
Para llegar a las semifinales nuevamente. Sin dudas. Estados Unidos y España, si está entera, están un paso por arriba. Se les puede ganar, lo hemos demostrado, pero en cuanto a profundidad, recambio y juventud, están un poquitito mejor que nosotros. Después no veo a nadie mejor que nosotros.
¿Cómo evaluaste el fixture?
La zona no influye tanto, porque clasificás igual a los octavos de final. Pero ese cruce nos tocó un poco más jodido. Eslovenia, Croacia y Brasil son tres rivales muy complicados. A priori ninguno es mejor que nosotros, pero si juegan bien te pueden ganar y pasar arriba porque son equipos fuertes. Confío que la experiencia y el peso de la Selección los limite.
Con todo lo que decís, ¿cómo hacés para aguantar las ganas de estar en el Mundial?
Ahora no tengo que aguantar las ganas, porque pienso poco. Estoy en el medio de una temporada muy jodida y pienso mucho en mi físico. En su momento decidiré, como te lo dije mil veces en la entrevista (risas).
Es que Manu está frente a una encrucijada y no puede sacarse de la cabeza la decisión que se le avecina. A esperar...
Deportes Clarín
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