NBA - FINAL - Miami no perdonó los errores de Oklahoma City y ganó 91-85

¿Cuál es el verdadero valor del resultado del tercer juego de la serie final de la NBA? Solo se podrá saber cuando finalice la misma, y será el equipo de Oklahoma City quien aguardará el desenlace con más expectativa. Sucede que el Thunder dejó pasar una gran oportunidad de recuperar la ventaja deportiva, y aspirar a ganar el título en casa ajena. En el otro costado se vio a un Miami más concentrado, haciendo el gasto desde el inicio, con el goleo de LeBron James, Chris Bosh, Dwayne Wade y Mike Miller. El local se plantó bien en defensa, impuso el ritmo y lastimó con variedad de opciones. La visita sin jugar bien se mantuvo en juego, pero permitió al Heat tomar demasiados rebotes en su propio acrílico. Cuando finalmente logró correr, el Thunder pasó a controlar el partido, llegó a su adversario adonde más le convenía, y así quedó un punto abajo al cabo de la primera mitad: 47-46. El tercer cuarto marcó un quiebre, porque OKC se recostó en una zona que Miami no pudo desarticular, y en ataque Westbrook y Durant lideraron al mejor pasaje de la visita. El Heat que se quedó sin Bosh por un largo rato (se lo cuida para que llegue más o menos entero hasta el final de la serie) dejó de ganar en la pintura rival, y se mantuvo con los puntos de James y Wade, aunque este último careció de efectividad. Oklahoma City llegó a sacar nueve, pero no pudo sostener la ventaja, cometió algunos errores, sobre todo faltas a destiempo, y se quedó sin Durant, que vio el final del capítulo sentado en el banco tras cometer su cuarta falta. Los dirigidos por Spoelstra aprovecharon la situación y terminaron el segmento ganando por dos: 69-67. El último parcial fue intenso y emotivo. Miami fue siempre adelante, y Oklahoma City se fue acercando con rachas, pero dependió demasiado de Durant. Las fallas en los libres (15/24) le jugaron en contra al visitante. El regreso de Chris Bosh resultó fundamental, porque volvió a imponer condiciones en ambos tableros. El Thunder se fue desdibujando a costa de errores y dejando muchos huecos defensivos. Wade se encargó que romper la primera línea defensiva de OCK, y James se hizo casi indetenible. Miami llegó a sacar siete (86-79) restando 2m19s, pero Oklahoma City metió un parcial de 6-0 para colocarse a uno. A partir de allí, el local lo cerró mejor definiendo el partido desde la línea de libres. La visita perdió el orden, su ofensiva fue muy confusa y así terminó entregando un partido que era clave ganar para tomar la delantera en la serie final, que ahora favorece a Miami por 2-1. Compartir More Sharing Services Share on facebook Share on myspace Share on google Share on twitter