Nicolás Romano es un jugador que desde su llegada a la Liga Nacional supo de hacerse de un nombre y un lugar. Atrás quedaron sus primeros juegos en Argentino de Junín para construir un presente que se fue haciendo cada vez más sólido a medida que iba logrando la maduración como jugador.
En las dos últimas temporadas encontró su lugar en Corrientes, donde se fue afianzando en la estructura de Regatas. Su primer contacto con la selección fue en cadetes en 2003, pero su primer torneo importante con los mayores lo jugó el año pasado, cuando formó parte del plantel que concurrió a los Juegos Panamericanos de Guadalajara.
Lamentablemente, la nota que debió hablar de sus méritos quedó en segundo plano, porque este domingo por la noche su nombre fue mencionado tras declarar en la red social Facebook que en la selección algunas convocatorias no tenían relación con el desempeño de los jugadores. Quien lo conoce sabe quién es Nico, una persona íntegra y de bajo perfil, pero el tono y el mensaje que dejó no podían pasar inadvertidos. Por eso lo llamamos y no dudó en responder y ponerse a disposición del medio.
En la entrevisa que le brindó a Basquet Plus habló de su paso por la selección con mucha sinceridad y también con un dolor que se presentó más que nada en resignación. No quiso entrar en polémicas y solo quiso dejar en claro su situación particular.
- Después de conocerse el último corte en la selección hiciste un comentario muy fuerte, hablaste de corrupción y muchas personas te apoyaron en función de lo que interpretaron. ¿Sos conciente del gran revuelo que se armó?
- Si, pero jamás quise esto... Mi intención no fue armar este revuelo, pero soy así, impulsivo, me tocó vivir una situación dentro de la selección que me hirió demasiado. Soy de perfil muy bajo, pero ante las injusticias actuó así.
- ¿Y cuál es la injusticia que notaste? ¿Qué te pareció mal?
- Mi intención era que se conozca mi verdad, acá voy a hablar por mi situación y por ninguna otra.
- A ver, comentame...
- Bueno, todo comenzó por la baja de un jugador de la preselección que se preparaba para el Sudamericano de Chaco. Ahí fue que me convocaron a mí. Obvio que estaba contentísimo y súper agradecido porque me tuvieron en cuenta nuevamente. Estuve concentrado unos 20 ó 22 días aproximadamente, y luego de ello me comunicaron que estaba desafectado de la selección. El motivo de mi enojo es que no hubo explicación alguna para que yo quede afuera, excepto que había que acortar el equipo, pero a mi hicieron entender que estaba cortado de antemano. Entonces creo que han jugado con mis sentimientos, porque jugar un Sudamericano en mi país iba a ser uno o el torneo más importante que me hubiese tocado jugar, y lo que más me dolió es que no fueron transparentes conmigo. No hablé antes porque nadie me había dado la chance de contar lo que me pasó, y con esto no quiero que se arme ningún revuelo sino que se conozca cómo fue mi experiencia en la selección, porque muchos que me preguntaron por qué había quedado afuera y nunca tuve una respuesta.
- Decís que no fueron transparentes, entonces, ¿de quien considerás que fue el error o la falta de comunicación?
- De quienes me convocaron, como ellos también fueron los que me tuvieron en cuenta... Son sentimientos encontrados.
- ¿Vos te referis a Néstor García?
- Yo me refiero a un conjunto de personas, porque a mí no me convoca una sola, sino muchas. Y Nestor García es la cara visible de todo esto.
- Bueno, pero en este caso quien queda expuesto es Néstor García, y vos te sentís defraudado por otras personas.
- Es de mal intencionado decir que Néstor (por García) carga con toda la responsabilidad, vuelvo a aclarar que fue él quien me eligió para esa convocatoria y hasta hice una buena relación, pero como dije antes, a mí me dieron a entender que estaba cortado de antemano, y no por mal rendimiento. Esto salta ahora porque se está hablando mucho del tema, pero yo vengo muy dolido de hace bastante tiempo, pero lo cuento como una experiencia de vida más. Me hago cargo de lo que publiqué en Facebook porque lo más importante que tengo en mi vida es mi mujer, mi hijo Camilo y el que está en la panza, y ellos solitos saben lo que yo sufrí por no haber formado parte de esa selección. Si algunas personas se sintieron ofendidas pido mil disculpas, no fue mi intención.
- El tema es que a raíz de tu comentario, muchos interpretaron que los agentes podían llegar a manejar las convocatorias.
- Las interpretaciones pueden ser muchas, no puedo hacerme cargo del imaginario colectivo.
- ¿Entonces qué quisiste decir que no hacía falta aclarar nada y que todos sabían de que estabas hablando?
- A que muchas personas comparten lo que pienso. Y que no había una intención de generar una polémica, pero soy consciente que era algo imposible, y lo único que sentí en ese momento fueron ganas de expresarme.
- A raíz de estas declaraciones, ¿te sentís afuera de futuras convocatorias?
- La verdad no lo sé, lo voy a dejar en manos de los que en ese momento estén al frente de la selección. A cualquier jugador le encantaría vestir los colores de la selección, y en mi caso es un honor, por ese motivo desearía que las cosas se manejen de una forma más sencilla y transparente.
- Pero esa sensación no la tuviste cuando fuiste convocado para Guadalajara, ¿o estoy equivocado?
- No se puede comparar, todas mis convocatorias fueron distintas, desde diferentes torneos a diferentes grupos, y esta es la primera que me dio esa sensación.
- ¿Como te definís?
- No me considero un jugador indispensable, pero sí que valoro mucho mi capacidad de sacrificio para mejorar día a día y poder ganarme un lugar en donde esté.
- ¿Y eso te hace sentirte valorado?
- Solo en la selección no me siento valorado.
- ¿El corte de Paolo Quinteros te llevó a actuar de manera impulsiva? ¿Fue la gota que revalsó el vaso y que te motivó a que todo esto salga a la luz?
- La verdad que sí, porque no podía creer que Paolo quedara afuera, y te lo dice un compañero que sabe día a día lo que él trabaja para estar ahí, y lo que es como jugador. Y quiero dar fin a esto pidiendo disculpas si herí susceptibilidades, soy simplemente una persona describiendo una sensación.
Roberto Martín
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