EUROLIGA - Caja Laboral aplastó al CSKA por 93-72 y se ganó una vida más

El Caja Laboral humilla al CSKA y prolonga la serie (93-72) / ACB Un espectacular Caja Laboral ha conseguido forzar el cuarto partido de cuartos de final, al superar con rotundidad a un CSKA desconocido (93-72), en un encuentro en el que la férrea defensa y el acierto de Milko Bjelica (15 puntos) y Thomas Heurtel (21) resultaron determinantes El próximo viernes Caja Laboral y CSKA Moscú disputarán un nuevo partido de la serie de cuartos de final de la Turkish Airlines Euroliga, tras imponerse el conjunto vitoriano en el primero de los encuentros disputados en Vitoria (93-72). La intensidad defensiva desplegada durante los 40 minutos, la entrega de cada integrante de la plantilla y el enorme acierto en el tiro, llevaron al equipo vitoriano a lograr una victoria de mucho mérito que le da plena confianza para afrontar lo que todavía queda por delante. Destacar la actuación de Milko Bjelica, determinante durante muchos minutos del choque, así como de Thomas Heurtel, que se reivindicó ante su afición, convirtiéndose en el máximo anotador del choque (21 puntos). El Caja Laboral se jugaba la vida en este encuentro y eso se notó desde los primeros compases, en los que la intensidad baskonista fue mucho mayor a la mostrada en los dos duelos precedentes disputados en Moscú. La presión defensiva era grande y eso provocó que los moscovitas erraran sus tres primeros ataques. Sin embargo, el conjunto de Zan Tabak tampoco aprovechó sus oportunidades y, nuevamente, fue el CSKA el que inauguró el marcador, gracias a un tiro de Sonny Weems. Pero las sensaciones eran diferentes. El Caja Laboral estaba luchando por cada balón igual que su rival y, por eso, conseguir una canasta no estaba siendo nada fácil para ninguno de los dos equipos. Fue gracias al acierto exterior como el equipo vitoriano abrió la primera brecha en el marcador (10-4), tras sendos triples de Milko Bjelica y Nemanja Bjelica, obligando a Ettore Messina a solicitar un tiempo muerto para intentar encontrar una solución a las dificultades que estaba encontrando su equipo para encarar la zona contraria. Como no, fue Milos Teodosic el que se encargó de recuperar a su equipo. Una canasta primero y una falta de Omar Cook después sobre el serbio, que se encargó de convertir los dos tiros libres de que dispuso, cortó la sangría, pasando del 12-4 al 12-8 a poco más de un minuto para el final del primer cuarto, al que se llegó con un ajustado 15-14. Y si la intensidad defensiva en el primer periodo había sido grande, el nivel no bajó en los inicios del segundo. Un 4-0 de arranque devolvió la ventaja al Caja Laboral, que estaba disfrutando de un Nemanja Bjelica muy metido en el partido y determinante en muchas acciones del juego. Con 8 puntos de ventaja (25-17, m.15), un amago de tangana, en el que se vieron implicados Teodosic y Nocioni, puso en evidencia la tensión que se estaba viviendo en la pista. La doble técnica pitada por los colegiados en ese momento tuvo una respuesta bien diferente de ambos conjuntos. Mientras el CSKA no encontraba su sitio en ataque, el Caja Laboral estaba doblemente motivado y con unos porcentajes de acierto tremendos, conseguía completar un parcial de 11-0 y colocarse con 15 puntos de ventaja mediado el segundo cuarto (32-17). Sonny Weems llevaba el peso de su equipo en los minutos previos al descanso, y punto a punto, iba trabajando por lograr recortar la ventaja baskonista. Pero el equipo vasco no estaba dispuesto a perder su renta y, nuevamente desde la línea de 6,75, Thomas Heurtel volvía a poner a cada uno en su sitio (38-24, m.19). Con 19 puntos de diferencia (43-24) se llegó al descanso. El Caja Laboral que se estaba viendo en el Buesa Arena nada tenía que ver con el que disputó en Moscú los primeros partidos. La entrega de cada jugador que saltó al parqué fue máxima, consiguiendo de ese modo convertir al potente CSKA en un equipo perdido, sin soluciones para encarar una defensa que no daba un balón por perdido y que ponía en enormes dificultades a su rival. El paso por el vestuario no hizo perder tensión al Caja Laboral, aunque como era lógico, la mejoría del CSKA sí se produjo, logrando mejores porcentajes en el tiro y leyendo algo mejor la defensa que desplegaban los baskonistas. Pero los baskonistas no estaban dispuestos a perder su renta y, por eso, metieron una marcha más a su juego, para seguir controlando a un conjunto moscovita sorprendido por el cambio radical mostrado por el equipo que tenía enfrente. Las gradas del Buesa Arena seguían disfrutando del juego alegre de los suyos, que movían el balón con precisión, encontrando la mejor posición posible para lograr el tiro perfecto. Además, el juego interior estaba superando con creces a los Kaun, Krstic o Krhyapa, mucho más determinantes en los anteriores duelos. Tras una antideportiva sobre Omar Cook y un triple de Fernando San Emeterio se llegaba al minuto 28 con 64-36 en el electrónico, llegando a 30 de ventaja sólo unos segundos después, tras un nuevo lanzamiento de tres puntos de Milko Bjelica (67-37). Con 70-39 arrancó el último cuarto y lo hizo del mismo modo, con un triple. Ya sólo quedaba por saber si el Caja Laboral se iba a relajar y permitiría al CSKA maquillar un marcador que resultaba humillante. Y eso fue lo que sucedió. El partido perdió la tensión ofrecida durante los 30 minutos precedentes. Los vitorianos tenían el triunfo en el bolsillo y los moscovitas parecían estar ya pensando en lo que quedaba por delante. Pero en parte era lógico. La diferencia había sido enorme durante todo el encuentro y el Caja Laboral había demostrado que muy poco tenía que ver con el que arrancó la eliminatoria. Aunque también es cierto que este CSKA que se vio en Vitoria no fue el mismo que estamos acostumbrados a ver. Al final, 93-72. El viernes, a las 20:30 horas, cuarto capítulo de la serie. Un nuevo match-ball para un Caja Laboral dispuesto a seguir peleando por sus opciones de estar en la Final Four de Londres, frente a un CSKA que saldrá rabioso por lo vivido este miércoles en el Buesa Arena. . Andrés Nocioni (Caja Laboral): titular, 10 puntos (1/5 dobles, 1/3 triples y 5/6 libres), 5 rebotes, 1 robo, 2 faltas cometidas y 3 recibidas en 23m12s. Valoración: +10. Fuente: Paloma Canosa / Prensa ACB