El entrenador de Estudiantes grita su malestar por la falta de acompañamiento que tiene su club y que ponen en peligro su continuidad en la Liga Nacional. Richotti lanza críticas al empresariado local y defiende a sus jugadores. Estudiantes, indicado en los pronósticos para pelear el descenso, está cumpliendo una campaña mejor de la esperada.
Enojado, indignado, dolido. Todos los adjetivos la caben a Marcelo Richotti, que no quiere apuntar su bronca contra nadie en particular, pero a la primera opción de hablar con LNB.com.ar, suelta una catarata de quejas incontenible: “Me venía callando desde hace bastante tiempo, pero ahora estoy saturado, porque veo cómo trabajan los dirigentes y cómo, desde todos lados, les cierran las puertas, les dan la espalda. Me duele decir esto, porque soy bahiense y hablo como habiense, pero acá hay muchos que se jactan de que somos la ‘capital del básquet’ y de los campeones olímpicos que tenemos. Sin embargo, muy pocos colaboran para que Estudiantes siga en la Liga Nacional. En Bahía Blanca se habla mucho de básquet, pero parece que no entienden que somos el único representante que tiene la ciudad, a nivel colectivo o individual, en el máximo nivel nacional de cualquier deporte. Habría que preguntarse si a la ciudad y a su gente le interesa tenerlo. Esa es la realidad de la ciudad, que dice saber mucho de básquet y no puede sustentar un equipo en la Liga Nacional”.
Richotti no para y sigue soltando: “Acá va a suceder lo mismo que cuando desaparecieron Pacífico y Olimpo, que después se preguntaban, ‘¿qué pasó?’. Se quejaron, pero cuando había que apoyar, no lo hicieron. Estudiantes necesita apoyo ahora, no en marzo, cuando se cierre el plazo de fichajes. Hoy corremos peligro de no terminar la temporada en la Liga Nacional o cómo mínimo de perder la categoría. Lo que tengo claro es que los jugadores, los dirigentes y el cuerpo técnico nos quedaremos con la conciencia tranquila, porque hicimos todo lo posible. Y no sé si todos podrán decir lo mismo”.
El entrenador no hace ningún esfuerzo por esconder su fastidio y se pregunta “¿porqué nos dan la espalda? No entiendo la razón. Mucha gente va a ver el torneo local y resulta que después no van al estadio cuando a Bahía Blanca vienen a jugar los mejores jugadores del país. Me dicen que Estudiantes no tiene nombres importantes, pero nos manejamos con el presupuesto que tenemos. Estos jugadores se matan por Estudiantes y dejan todo en la cancha. Nadie les puede reprochar nada, porque a pesar de los problemas de lesiones, de tener una ficha menos y de que a veces no completábamos 10 jugadores para entrenar, siempre fuimos competitivos. Les puede gustar o no como juega Estudiantes, pero a pesar de nuestra limitaciones, nadie nos llevó por delante, les jugamos de igual a igual a todos y ganamos más partidos de lo que muchos esperaban. En lo deportivo vamos a seguir jugando con la misma dignidad y el mismo orgullo”.
Como uno de los principales referentes del básquetbol bahiense de las últimas décadas, a Richotti le resulta imposible detenerse y dispara: “No sé porqué no nos da crédito nuestra propia gente. En otra ciudad puedo entenderlo, pero no en Bahía Blanca, que tiene 400 mil habitantes y muchas empresas. Fuster y Faggiano están trabajando mucho y solo reciben palos. Ellos no quieren prometer lo que no van a cumplir y es entendible. Consiguieron algo de apoyo, pero se necesita más, aún cuando tenemos el presupuesto más bajo de la Liga Nacional. En este receso veo que todos los clubes están haciendo cosas para mejorar y nosotros no podemos mantener siquiera lo que teníamos. Nosotros vamos para atrás, nos debilitamos, cuando entramos en la parte decisiva de la temporada. Ojalá que alguien entienda la situación y se interese por el básquetbol de la ciudad. Así como vamos, perderemos lo poco que nos queda”.
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